SANTIAGO.- El Q50 es un sedán de lujo que pese a no tener la publicidad ni el renombre de sus rivales germanos, no tiene nada que envidiarles.
Su debut en Sudamérica se produjo precisamente en Chile, razón por la que ha sido uno de los pilares de la presencia de la marca en el país.
Probamos la versión híbrida de este modelo que no presenta mayores diferencias estéticas frente a las otras dos versiones disponibles (2.0 turbo y 3.0 twin turbo), pero que lógicamente difiere en lo que se refiere a su tren motriz.
Estéticamente cuenta con un diseño muy atractivo, con líneas deportivas y elegantes, que se combinan de buena manera con su equilibrado tamaño. Al revisar sus especificaciones nos encontramos con que el Infiniti Q50 S Hybrid alcanza los 4.800 mm de largo, 1.820 mm de ancho y 1.455 mm alto, mientras que su distancia entre ejes es de 2.850 mm. El maletero, en tanto, ofrece una menor capacidad de carga que sus hermanos (400 litros) para poder acomodar el juego de baterías del sistema híbrido. Hecho que también incide en su mayor peso, 1.794 kg (150 kg más que las otras dos versiones).
Interior elegante
Su habitáculo cuenta con materiales y terminaciones de muy buena calidad, dignas de un auto de este segmento. Lo que se ve complementado con un diseño elegante, que contribuye a realzar la atmósfera premium de su interior.
Sin embargo, el espacio que ofrece no es tan amplio debido a su diseño aerodinámico. Por ejemplo, las plazas traseras sólo están pensadas para llevar a dos adultos y la caída del techo reduce el área disponible para las cabezas de estos.
El panel de instrumentos tiene un diseño atractivo y de muy buena legibilidad, mientras que el asiento del conductor permite adoptar una cómoda posición de manejo y ofrece una buena sujeción lateral.
Entre el completo equipamiento del Q50 S Hybrid, destacan el excelente sistema de audio Bose con 14 parlantes y el de infoentretenimiento, que entrega mucha información y permite ver cómo va trabajando el sistema híbrido, ya que según el modo de conducción seleccionado puede moverse en modo 100% eléctrico, impulsado exclusivamente por el motor a combustión o con ambos. Lo interesante es que pese a la gran cantidad de información que entrega, este resulta muy fácil de usar, debido a que es muy intuitivo.
En materia de seguridad, este incluye seis airbags y sistema de monitoreo de presión de neumáticos (TPMS), entre otros.
Doble personalidad
Debido a su tren motriz híbrido, compuesto por un motor V6 de 3,5 litros y otro eléctrico, el sedán híbrido de la marca japonesa esconde dos personalidades. Por un lado puede ser un auto muy confortable y silencioso cuando circula en modo eléctrico o un verdadero deportivo cuando se saca el máximo provecho a los 360 caballos de fuerza y 546 Nm de torque a 1.470 rpm que erogan en conjunto ambos propulsores.
La gestión entre ambos motores y la caja de cambios automática de siete marchas (con levas al volante) es muy armoniosa y rápida, lo que permite disfrutar de aceleraciones y recuperaciones muy rápidas, haciendo que el auto se sienta ágil e incluso ligero. Lo que sumado a su tracción trasera lo convierte en un vehículo sumamente agradable de manejar.
Cuando se acelera a fondo, el Q50 S Hybrid responde de manera briosa, catapultándonos hacia adelante, tanto así que a veces se siente como las ruedas traseras luchan por tracción, activándose los controles de tracción y estabilidad para mantener todo en orden. Los que de todas maneras se pueden desactivar, si lo que buscamos es mantener el dominio absoluto del auto.
De esta forma, el sedán japonés alcanza con sorprendente facilidad los 100 km/h, especialmente si se toma en consideración que se trata de una berlina de 4,8 metros de largo y casi 1.800 kilos. Pese a esto, el Q50 S Hybrid siempre mantiene su compostura, siendo un auto dócil y fácil de manejar. A lo que se suma un consumo bastante bueno para un vehículo de estas prestaciones (10,5 km/l en ciudad).
Los ingenieros de Infiniti dotaron además a esta berlina con el Selector Drive Mode, dispositivo que permite variar la respuesta del motor y la caja según el programa (Sport, Personalizado, Nieve, Económico y Standard).
Su suspensión deportiva absorbe muy bien las imperfecciones del camino y ofrece un andar sumamente placentero, pero manteniendo un gran nivel de aplomo cuando se aplica una conducción intensiva.
La dirección, en tanto, es adaptable en cuatro modos de dureza y resulta muy precisa y agradable al tacto.
Finalmente, los frenos de discos ventilados con sistema ABS, Asistente de Frenado (BA) y distribución electrónica de frenado (EBD) entregan una buena capacidad de detención, a la vez que permiten una fácil modulación a través del pedal.
| Aspecto | Nota |
|---|
| Apariencia | 8,5 |
| Confort | 7,8 |
| Economía | 7 |
| Comportamiento | 9 |
| Seguridad | 7 |
| Promedio | 7,86
|
HIBRIDO
10,5 km/l
AUTOMATICA
3,5 l
360 hp
SEDAN
$29.900.000
