El concepto de “ciberseguridad” cada vez toma más fuerza en el mundo público como privado. Pese a ello no son pocas las empresas nacionales y extranjeras que operan con mínimos resguardos en caso de ser blanco de estas actividades ilícitas, tal como quedó en evidencia durante 2018 tras una seguidilla de ataques cibernéticos a instituciones de la banca nacional.
Así lo revela la “Encuesta de Seguridad de la Información Global 2018-2019” realizada por la firma consultora EY y que abarcó un universo de 1.400 empresas al rededor del mundo.
Gracias a este sondeo se pudo establecer que, por ejemplo, el 77% de las firmas encuestadas trabajan con protecciones básicas de ciberseguridad y que llegado el momento estas serán insuficientes para hacer frente a un ataque de estas características.
De hecho, el 55% de los encuestados simplemente no consideran la protección de la organización como una parte integral de sus planes de ejecución y estrategia de negocios.
“Los resultados son cada vez más alarmantes”
Marcelo Zanotti, Socio Líder de Consultoría de Riesgo de EY, dijo en entrevista en EmolTV que estos y otros números “son cada vez más alarmantes”.
Explicó que “es un error pensar que la ciberseguridad es solo un problema de las grandes empresas y del sector público. Hoy por hoy, cualquiera de nosotros, incluso nuestros hijos, pueden verse afectados por un ataque (...) Que hoy día una empresa piense que no va a ser afectada, que no va a ser víctima de un ciberataque, te diría que es una locura”.
Añadió que aún cuando el sondeo realizado es a nivel mundial, sus resultados se pueden extrapolar al escenario local donde las empresas deben comenzar a invertir en este tipo de protección, ya que cualquier brecha de seguridad puede afectar la imagen y la confianza que el público y los clientes tienen con esta.
“Lo que estamos viviendo hoy es una etapa donde la confianza marca la diferencia de las organizaciones. Una organización que se ve afectada por una brecha en seguridad automáticamente tiende a bajar la confianza que en ellos depositaron sus clientes y el mercado en general. Eso ocurrió el año pasado con los casos más conocidos de la banca. Es decir, cuando se conoce que efectivamente hay una brecha de seguridad, cuando se roban datos, lo primero que se rompe es la confianza en el cliente, en el consumidor”, dijo el experto.
Añadió que la firma EY ha realizado este sondeo los últimos 21 años y que “los resultados son cada vez más alarmantes” en el sentido que se observa un incremento real de las amenazas cibernéticas y un constante perfeccionamiento de estas, mientras el sector público y privado avanza lentamente en la materialización de protocolos de seguridad que eviten estos ataques.
Faltan especialistas
Un hecho que también preocupa, precisó Marcelo Zanotti, es la escasez de personal especializado en materia de ciberseguridad.
De hecho, dijo el experto, la inexistencia de talentos vinculados a esta área se ha transformado en un problema en Estados Unidos.
Precisó que en actualmente en el país del norte hay unos 700 mil profesionales empleados que trabajan en temas de ciberseguridad y que existen otros 350 mil cupos sin llenar y que solo vienen a cubrir las necesidades de las empresas de ese país.
De ahí la necesidad de potenciar políticas que promuevan el trabajo entre el sector público y privado para formar estudiantes con este tipo de habilidades, extremadamente necesarias para hoy y el futuro.
