Luis Berríos, representante de la Vicaría Pastoral Social Caritas del Arzobispado de Santiago.
El Mercurio
SANTIAGO.- Beirut, en el Líbano, es el destino al que viajarán los representantes del Ministerio del Interior, del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y de la Vicaría Pastoral Social Caritas, quienes partirán este sábado con el fin de conocer a las posibles familias beneficiadas por el Programa de Reasentamiento de Refugiados Sirios en Chile.
Luego de una semana de trabajo en terreno, regresarán al país con la nómina de las 60 personas (cerca de 15 familias) que serán acogidas en esta primera etapa del proyecto, las cuales llegarán entre octubre y diciembre a instalarse a las comunas de Macul y Villa Alemana.
Ambas ciudades fueron elegidas considerando aspectos como su conectividad, oferta laboral y diversidad de viviendas.
La iniciativa no implica gastos para los municipios -contempla una inversión de $1.084 millones por parte del Estado y un aporte de $528 millones de ACNUR durante dos años-, pero sí considera que apoyen la inserción e instalación de los sirios en las redes educacionales, sociales y de salud de cada comuna.
Una vez que las familias estén identificadas, se estableció como prioridad que cada municipio localice las viviendas más aptas para cada una.
Luis Berríos, secretario ejecutivo de la Vicaría Pastoral Social Caritas del Arzobispado de Santiago, explica que "la idea es que estén juntos, pero no tanto". Detalla que podrían ubicarse dos o tres familias por barrio o manzana, para así potenciar su aprendizaje del español y la interacción con sus vecinos chilenos.
