Andrés Iniesta es uno de los mejores mediocampistas de la historia. Lo ganó todo con el Barcelona y consiguió dos Eurocopas y un Mundial con España. Actualmente vive el otoño de su carrera en Japón. Pero entre tantos éxitos, el "Cerebro" sufrió una dura depresión. Así se cuenta en el documental "Andrés Iniesta: El héroe inesperado".
"Desde que marcó el gol en Stamford Bridge (en las semifinales de la Champions League del 2008/09 frente al Chelsea) hasta el que hizo en la final de Sudáfrica (contra Holanda en 2010) atravesó su mejor momento deportivo, pero también fue su período más oscuro desde el punto de vista personal", le dijo el guionista del documental, Marcos López, al sitio Infobae.
Mucho tuvo que ver Dani Jarque. El futbolista del Espanyol, íntimo amigo de Iniesta, murió inesperadamente en una concentración.
Solo su familia supo de la enfermedad que aquejaba al mediocampista. Sus compañeros se enojaban porque no terminaba las prácticas. Gerard Piqué, tiempo después, le pidió disculpas.
"No sabía cómo tratarlo, porque nunca me había pasado que un deportista de ese nivel sufra esa situación. Lo único que le dije fue que si no se sentía bien, podía irse cuando quisiera", relata el entrenador Pep Guardiola.
"Los días pasaban y me daba cuenta que mi situación no mejoraba. No me sentía bien, no era yo mismo. Lo veía todo negro", agregó el propio futbolista.
Un día Iniesta les pidió a sus padres si podía dormir con ellos. No entendían qué pasaba con su hijo, un adulto exitoso y aclamado por el mundo entero. Uno de sus amigos cuenta que le decía que no tenía ganas de nada y que se le había olvidado cómo jugar al fútbol.
Su esposa, Ana, fue y es un pilar de su vida. La pareja perdió un hijo a los siete meses de embarazo. Luego, el volante le dedicó una carta a la mujer.
"Eres única, eres valiente, tienes un corazón enorme… te doy las gracias por la entereza que siempre has tenido, por lo grande que fuiste cuando nos dieron la noticia de que habíamos perdido a nuestro hijo. No todos consiguen superar situaciones tan delicadas, Ana. Y tú lo hiciste. Eso nos hizo mejores, y desde entonces pienso que un ángel nos acompaña. Y es sólo el principio, porque a tu lado lo mejor está siempre por llegar", narró.
Para el Mundial de Sudáfrica, Vicente Del Bosque esperó hasta al final a Iniesta, aquejado por una lesión y sus problemas personales. En Johannesburgo vivió uno de los momentos más épicos de su vida. Anotó el gol con que España venció a Holanda en la final y con el que ganó su primera Copa del Mundo. La dedicatoria fue para Dani Jarque.
"Fue muy lindo terminar ese tema con la imagen de la camiseta en el estadio del Espanyol y la presencia de los padres de Dani. Ningún compañero sabía que la tenía puesta y cuando hizo el gol dijo que sintió una fuerza del cielo que le quitó la camisa de la selección para mostrar el mensaje que tenía. Fue un homenaje de Andrés a su amigo", apuntó López.
Iniesta llegó de su pueblo, Fuentealbilla, a vivir a La Masía con doce años. Sus padres lo iban a ver una vez al mes y esas visitas lo dejaban destruido. López ve un vínculo entre eso y lo que vivió ya de adulto.
"Si bien los padres iban a visitarlo una vez por mes, cada vez que volvían a su pueblo significaba un dolor muy intenso para Andrés. Y cuando ya era capitán del Barça pasó por ese período de depresión del que salió muy fortalecido. En la actualidad, todos los días trata de ser mejor persona", cerró.
