Con 27 años, el estadounidense Brook Koepka se coronó campeón del US Open de golf.
AFP
SANTIAGO.- Hizo historia. Con 27 años, el estadounidense Brook Koepka se coronó campeón del US Open de golf tras una emocionante jornada en el campo de Erin Hills, en Wisconsin, con una tarjeta de 272 golpes, 16 bajo el par, y de paso consiguió el primer major de su carrera.
El deportista de Florida igualó el mejor resultado de la historia del US Open, desde la victoria en 2011 en Congressional del norirlandés Rory McIlroy, uno de los favoritos que no superaron el corte para el fin de semana.
Koepka terminó con cuatro golpes de ventaja sobre los segundos, el también estadounidense Harman (-12) y el japonés Hideki Matsuyama (-12), y por delante de un nutrido grupo de compatriotas con poca experiencia en majors.
Con una potente pegada y apasionado del béisbol, el norteamericano, quien para muchos especialistas es un golfista atípico, empezó a forjar su carrera en las ligas menores del Challenge Tour Europeo y que hoy le permitieron ingresar al club de los mejores jugadores del mundo que no habían ganado un grande.
Comenzó a dedicarle más tiempo al golf cuando, después de un accidente automovilístico, se fracturó la nariz y tuvo que evitar durante el verano los deportes de contacto.
"Para ser sincero, no soy un gran 'friki' del golf. Es un poco aburrido, no tiene mucha acción. Vengo de una familia amante del béisbol y lo llevo en la sangre", señaló el 2015 en una entrevista a Golf Digest.
"En mi mente ya estoy dentro de ese grupo de contendientes con Rory McIlroy, Jordan Spieth o Jason Day, aunque aún no lo esté en realidad. Mi mente siempre va 10 pasos adelante. Quizá no debería ser así, pero eso me ayuda a la larga", reconoció Koepka en esa misma entrevista y que este año acumula en el PGA Tour seis top 25 y cuatro top 10.
El 2012 estrenó su palmarés como profesional en Tarragona y ahora, después de cinco años, es el primer golfista en llevarse más de dos millones de dólares en un torneo mayor.
Tras conquistar el US Open, Koepka manifestó que "no gane antes porque estaba buscando la victoria tanto que me olvidaba de jugar. Lo que he hecho es alucinante".
