Departamento de Policía de Corvallis
Un nuevo accidente carretero tiene como protagonista a un modelo de la marca Tesla. No obstante, a diferencia de otras oportunidades esta vez la noticia no pasa por un error en su sistema de autoconducción (AutoPilot), sino que por los estragos que generaron sus pequeñas baterías, las que salieron disparadas dado la energía del impacto.
Medios de prensa estadounidenses indicaron que estas pilas terminaron golpeando algunos apartamentos cercanos y hasta originaron un amago de incendio luego que una de ellas cayera sobre ropa de cama.
El accidente ocurrió en Corvallis, Oregón (EE.UU.), cuando un conductor, que presuntamente iba bajo los efectos de estupefacientes, estrelló su Tesla Model 3 2019 a unos 160 km/h contra un poste de electricidad junto a un edificio de apartamentos.
El impacto fue tan fuerte que hizo que los paquetes de baterías montados en el chasis del Tesla se abrieran, enviando algunas de las más de 7000 celdas cilíndricas contra los edificios cercanos, incluso una de ellas cayó en el regazo de una persona.
Estas pequeñas pilas alcanzan altas temperaturas durante la carga y marcha del vehículo. De hecho, se indica que estas pueden permanecer calientes hasta por 24 horas y podrían causar quemaduras si llegan a ser manipuladas.
De ahí que los servicios de emergencia que concurrieron al accidente estuvieron más de tres horas recolectando las pilas a fin de evitar eventuales incendios. De hecho, los departamentos de policía y bomberos de Corvallis emitieron instrucciones para cualquiera que pudiera encontrar una celda de batería de aviso a la autoridad y evite tomarla, más aún si están dañadas, ya que pueden derramar sustancias que podrían dañar a personas y animales.
Otro elemento que causó daños tras el impacto, fue una de las ruedas del Model 3, la que salió disparada rompiendo una tubería de agua e inundando partes de la vivienda.
