EFE
SANTIAGO.- "Prefiero sentarme detrás de las barras apoyando lo que creo, que ceder en algo en lo que fuertemente no creo", señaló Rebecca Bredow hace exactamente una semana al medio WXYZ Detroit. Y así tendrá que hacerlo, luego de que hoy la mujer fuera sentenciada a pasar siete días en prisión por negarse a vacunar a su hijo de nueve años.
Pero eso no es todo, ya que su decisión también significó que la custodia temporal del menor ahora la tendrá su padre, quien sí quería que su hijo fuera vacunado.
El "papá también tiene una voz" en el asunto, argumentó Karen McDonald, la jueza del condado de Oakland que entregó el veredicto sobre el caso.
Según explicó la magistrada, Bredow violó el acuerdo al que había llegado con su ex esposo en noviembre de 2016, en el sentido de que vacunarían al niño, aunque algunas inyecciones serían retrasadas
Sin embargo, un tiempo después la mujer dio pie atrás y se negó a vacunar a su hijo, ya que -aseguró- el procedimiento va en contra de sus creencias. Una decisión que molestó a su ex esposo, por lo que presentó el caso ante la justicia.
"Siento que mis derechos como madre me han sido arrebatados (...) Cada padre tiene una opción, pero también tenemos el derecho a que nuestra voz sea escuchada. Entonces, ¿por qué automáticamente se ponen del lado del padre que quiere las vacunas?", planteó la semana pasada la mujer en una entrevista.
Bredow mantuvo su posición de no vacunar a su hijo, por lo que la corte la acusó de desacato y hoy la envió a prisión.
