Una agenda copada de reuniones, actividades, y con un teléfono que no deja de sonar. Así han sido las últimas semanas del presidente del Senado, Álvaro Elizalde, el que se ha posicionado como uno de los políticos a liderar, junto a su par de la Cámara Baja, Raúl Soto, las tratativas para dar continuidad al proceso constituyente. Pese a que presidía el Partido Socialista la mayor parte del tiempo que funcionó la Convención, el senador evita la autocrítica y considera que las colectividades no tienen responsabilidad en las debilidades que tuvo el órgano redactor. Fue crítico, en ese entonces, de temas como el diseño del sistema político, pero a su vez fue un defensor del Apruebo. En entrevista con El Mercurio, Elizalde responde "no" a la consulta de si fue un error estar por el Apruebo: "No, en especial cuando el debate consistió en establecer cuál era el mejor punto de partida. Asimismo, señala que fueron "múltiples las razones" que identifica como causas para la derrota de esa opción en el Plebiscito, aunque "creo que lo más importante fue lo que pasó dentro de la Convención. Por ejemplo, la deferencia con los símbolos patrios".