EMOLTV

Nuevas figuras tras las elecciones: El escenario que se abre para establecer un movimiento verde en Chile

La irrupción de convencionales y gobernadores con agenda medioambiental podría ser un comienzo para frenar la histórica dispersión política del sector.

22 de Junio de 2021 | 08:01 | Por Felipe Vargas Morales, Emol
imagen

Una de las jornadas de manifestación de los vecinos de Quintero tras la crisis ambiental de 2018 (imagen referencial).

Emol
Uno de los grandes temas que marcó la elección de convencionales constituyentes fue el medioambiental, ya que hubo cientos de candidatos que plantearon la necesidad de establecer el acceso al agua y energías renovables como un derecho fundamental o la importancia de contar con una Constitución ecológica, entre otras medidas.

De hecho, diversas organizaciones del área calculan que cerca de 50 miembros del órgano que redactará la nueva Carta Fundamental abogarán por estas y otras materias, como la protección de los recursos naturales, una mayor regulación de las actividades económicas extractivas y otras preocupaciones.

Entre ellos, está la representante del distrito 3, Cristina Dorador, quien fue electa como independiente en la lista de Independientes del Norte; su par del distrito 12, Juan José Martín (Independientes por una nueva Constitución) y Gloria Alvarado, convencional por el distrito 16 de la Lista del Pueblo, por mencionar solo algunos.

Asimismo, una de las sorpresas de los comicios de gobernadores fue el triunfo de al menos tres candidatos con una marcada agenda verde: Krist Naranjo (IND-Partido Ecologista Verde) en Coquimbo; el líder de Modatima, Rodrigo Mundaca (IND-RD) en Valparaíso, y el ambientalista Ricardo Díaz (IND-UC) en Antofagasta.

Y si a ello le sumamos que la mayoría de los candidatos presidenciales ha destacado la importancia de abordar el cambio climático en sus programas, no cabe duda de que se trata de un buen momento para aquellos que promueven dichas ideas en el país y que históricamente no han logrado articular una alternativa sólida a nivel político.

Y es que más allá de algunos hitos particulares, y a diferencia de lo ocurrido en otras latitudes -donde han logrado permear en parlamentos y gobiernos nacionales- los verdes chilenos han tenido dificultades para acceder al poder institucional por distintas razones, ya sea por la dispersión del movimiento o malos resultados electorales.

Entre quienes forman parte de las diversas agrupaciones que abogan por los derechos medioambientales, hay coincidencia en que los últimos resultados son el reflejo de un cambio en la percepción de la ciudadanía frente a los problemas ecológicos, los cuales no estaban tan interiorizados en décadas pasadas.

El rechazo a proyectos de alto impacto como Pascua Lama e HidroAysén, que incluso motivó una masiva e histórica marcha verde en 2011, más la continua irrupción de zonas de sacrificio contribuyeron a una mayor conciencia e incidieron en la nueva realidad de un movimiento que por décadas ha intentado entrar al sistema político.

Ello fue de la mano con otros hitos, como la decisión de elevar a rango ministerial a la Comisión Nacional del Medio Ambiente (CONAMA), en el primer gobierno de la ex Presidenta Michelle Bachelet, y la posterior creación del ministerio en 2010, durante la primera administración del Presidente Sebastián Piñera.

En la última década, las políticas públicas sobre la materia adquirieron otra relevancia, destacando el liderazgo que ha ido tomando Chile a nivel mundial en protección de áreas marinas y utilización de energías limpias, lo cual se vio reflejado en la decisión de las Naciones Unidas de otorgarle la presidencia de la COP25.

Los intentos por entrar

Sin embargo, el camino para los ecologistas ha sido largo. Sus inicios se remontan a mediados de los ’80, cuando grupos ecopacifistas y humanistas forman un partido. En 1987 surgen "Los Verdes", colectividad que se sumó a la Concertación de Partidos por la Democracia y compitió con dos candidatos en las parlamentarias de 1989.

Tras obtener solo el 0,22% de los votos, se disolvió y tuvo que fusionarse con el PH, formando la Alianza Humanista-Verde (AHV). No obstante, igual consiguieron entrar al gobierno de Patricio Aylwin en cargos intermedios, como la subsecretaría de Bienes Nacionales, que en esa época estaba encargada de los temas medioambientales.

En los años siguientes, los resultados no fueron mejores. En las municipales de 1992, consiguieron 15 concejales con un 0,82% y ningún escaño en las parlamentarias del año siguiente. Eso sí, en 1993 se crea el Movimiento Ecologista, el cual levanta al primer candidato presidencial ecologista de la historia de Chile: Manfred Max Neef.

La aventura del economista obtuvo un 5,5% de los votos, llegando en cuarto lugar y superando a los postulantes del PC y la AHV, que postuló con Cristian Reitze. Pese a ir separados en la presidencial, en la parlamentaria ambas partes fueron unidos, pero los resultados siguieron la norma: De 48 postulantes, ninguno electo, con un 1,43% total.

Luego, en 1995, los fundadores de Los Verdes se separan del PH y forman el Partido Movimiento Ecologista, pero en las parlamentarias de 1997 nuevamente sacan un mal resultado y la colectividad vuelve a unirse a los humanistas. En 1999, respaldaron al candidato presidencial Tomás Hirsch (PH-PC) y terminan desapareciendo en 2001.

Sin embargo, en los comicios de ese año, otros grupos ecologistas promovieron la candidatura presidencial de la directora del programa Chile Sustentable, Sara Larraín, quien logró un 0,44% de los sufragios. En el primer lustro de los 2000, los intentos por competir se vieron reducidos hasta el surgimiento del Partido Ecologista Verde (PEV).

2017fue el año en el que por primera vez entra un ecologista al Congreso
En 2006, el PEV surge en Concepción y debuta en las municipales del 2008, logrando un concejal en la comuna de San Pedro de la Paz. En 2009, se aliaron con el Partido Progresista de Marco Enríquez Ominami, a quien apoyaron en la presidencial de ese año. En las parlamentarias, la historia se repitió: Sin electos y solo el 0,06% de votos.

Para las presidenciales de 2013, proclaman a su primer candidato propio, Alfredo Sfeir, quien obtuvo el 2,35% de los sufragios. En diputados y senadores no logran escaños, pero si obtienen un cupo de consejero regional en el Biobío, con Félix González, quien más tarde se convertiría en el primer ecologista en entrar al parlamento en 2017.

{La experiencia internacional}
El recorrido de los verdes chilenos en la institucionalidad ha sido más lento que en otros países, sobre todo porque la preocupación medioambiental nació mucho antes en Europa, cuando los distintos movimientos ecologistas comenzaron a organizarse en partidos a principios de los años ’70.

Entre ellos, el más fuerte fue el que se generó en Alemania Occidental, dirigido por la activista Petra Kelly, el cual se fundó en 1980 por representantes de los movimientos de protesta juvenil, del movimiento ecologista y pacifista y que cinco años después logró entrar al parlamento alemán.

Tras la reunificación alemana, Die Grünen se unió al partido ecologista de la Alemania Oriental, Bündnis 90. Juntos, entre 1998 y 2005 participaron en el gobierno federal en coalición con la socialdemocracia (SPD). Luego fueron oposición a Angela Merkel, logrando la mayor representación en el parlamento a nivel mundial con 68 escaños.

Lograron poco más del 10% del total, algo que hasta entonces ningún otro partido ecologista había conseguido obtener y 2017 mejoraron aún más sus resultados, alcanzando un 8,9% en las elecciones. Hoy en día, son una de las principales alternativas para reemplazar a Merkel en el poder.

A nivel continental, el ecologismo vivió un auge en los últimos años de la mano de la preocupación por el cambio climático, reavivado con las multitudinarias marchas lideradas por Greta Thumberg. El año pasado, obtuvieron sendos triunfos en las municipales de Francia, lo cual luego se ha visto replicado en otras naciones.

Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Austria, Suiza, Suecia y Finlandia también han visto progresar los apoyos a los verdes, que a tienen 73 escaños en el Parlamento Europeo, siendo la quinta fuerza política detrás de los bloques tradicionales de la socialdemocracia y la centro derecha.

A nivel latinoamericano, se han visto diversas experiencias con distintos resultados. En Colombia, por ejemplo, surgieron en 2005 pasando por distintos nombres hasta denominarse Alianza Verde en 2013. En las presidenciales de 2010, su candidato Antanas Mockus, pasó a segunda vuelta, siendo derrotado por Juan Manuel Santos.

Desde entonces, sus resultados han ido mejorando, sobre todo en el Senado, donde el partido pasó de un 4,8% en 2010 a un 8,6% en 2018. En Brasil, en tanto, han ganado amplia influencia, de la mano de Marina Silva una de las principales figuras ecologistas de la región y que ha sido ministra, senadora y candidata a la presidencia.

La visión de los verdes locales

Una voz autorizada para hablar del movimiento en Chile es Sara Larraín. Ex candidata presidencial en 1999, tiene una vida dedicada a la lucha ecologista, sobre todo a partir del programa Chile Sustentable, a través del cual ha aportado una serie de insumos técnicos para el debate de leyes y programas gubernamentales con foco verde.

Ante la nueva ola de líderes medioambientalistas que lograron llegar al poder tras las últimas elecciones, asegura que hay que hacer una distinción, ya que hay al menos un cuarto de la Convención está a favor de una Constitución ecológica y que hay un 20% más que está por disciplinar con mayores regulaciones ambientales el actual modelo.

"El proceso constitucional va a ayudar a articular a los distintos movimientos, porque se van a profundizar los temas".

Sara Larraín, ecologista
"Unos tienen más una agenda ecologista y estructural sobre un cambio de rumbo en el modelo de desarrollo, otros son más ambientalistas, es decir, que quieren poner condiciones fuertes en un modelo de desarrollo no muy distinto, pero claramente evitando que se siga destruyendo todo, en el nivel estándar OCDE", explicó.

Sobre el futuro del movimiento verde en Chile, Larraín indicó que "el movimiento es muy grande, lo que pasa es que no está institucionalizado en un solo partido o coalición, pero hay una coincidencia en la agenda, que es tremendamente importante, porque los desafíos son transversales".

"Hay un abanico grande de organizaciones territoriales, ONG, partidos políticos progresistas, sectores académicos que están incluidos en esta agenda programática. Pero es importante que haya una institucionalización política y que el PEV, que logró cerca de 50 concejales, aumente y logre alcaldes más allá de una gobernación", explicó.

En esa línea, destacó que "el proceso constitucional va a ayudar a articular a los distintos movimientos, porque se van a profundizar los temas y va a permitir articular a sectores que hoy día aparecen frente a la opinión pública con una agenda ecológica, pero que no es tal, que va desde el rango ambiental hasta una Constitución ecológica".

En cuanto a las dificultades que han tenido los ecologistas para entrar a posiciones de representación política, indicó que "antes de la reforma al sistema binominal era muy difícil, a mi me tocó inscribir tres veces al Partido Ecologista. Si no lográbamos el 5% perdíamos todo y volver a inscribir".

"Había obstáculos de entrada a los nuevos movimientos al sistema político y eso después se facilitó. Antes era una especie de laberinto kafkiano el poder estructurar organizaciones políticas, ahora falta perfeccionar, pero hoy es mucho más posible que distintos colectivos a nivel nacional puedan organizarse", recalcó.

La apuesta de los ecologistas

En tanto, el presidente del PEV, Félix González, destacó que los partidos verdes se han despegado en Europa y Latinoamérica, subrayando que son colectividades que tienen alrededor del 10% de la votación, lo cual a su juicio fue lo que ocurrió en la elección de gobernadores, donde cinco de sus abanderados superaron ese umbral.

De hecho, en Los Lagos obtuvieron un 16%, en Biobío un 15%, en Ñuble un 11%, en O’Higgins un 19% y en la Metropolitana un 15%. "Esto no es puntual, el PEV tuvo una votación pareja y en todo Chile obtuvimos más de 700 mil votos. En concejales, en las comunas que fuimos, sacamos un 11%, y por eso tenemos 47 electos", dijo.

En ese escenario, González aseguró que en las próximas parlamentarias de noviembre "vamos a ir en todos los distritos en las regiones en las que estamos legalizados, ya que tenemos los números para tener una bancada parlamentaria y de consejeros regionales. En términos de números, vemos que seguimos creciendo".

"Nos ha llamado mucha gente independiente para sumarse al partido, otros para ir como independientes en cupos, que son líderes en sus comunidades. Somos un partido emergente que todavía está en un crecimiento que no ha terminado y al igual que los arboles nativos va creciendo lento y fuerte en 12 años", indicó.

En cuanto a la posibilidad de que se forme un movimiento ecologista que supere al PEV, el diputado indicó que "lo que pasa es que hay personas que están en movimientos ambientales que son independientes y otros que militan en distintos partidos. Nosotros no pretendemos que estén todos en el PEV".

"Pero poco a poco se han ido incorporando, por ejemplo, Nathaly Joignant, que era vocera de Alto Maipo y sacó un gran resultado en la metropolitana, se incorporó hace un año, y en este momento se están afiliando muchos ambientalistas. Viviana Delgado, que fue candidata a alcaldesa por Maipú y sacó 20% se inscribió este viernes", dijo.

Según el dirigente, ambas serán candidatas al parlamento y la mayoría de los candidatos a gobernador que superaron el 10% también postulará en sus regiones. Y en cuanto a la presidencial, no tienen legalidad para hacerlo, pero hay una propuesta de no presentar candidatura "para no dispersar los votos en contra de la derecha".
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?