El libertad quedaron los militares indagados por un incidente ocurrido el sábado durante toque de queda en Villa O'Higgins y que dejó dos civiles con heridas de perdigón y bala.
Así lo señaló la fiscalía regional de Aysén a través de un comunicado, indicando que la decisión se adoptó luego que los uniformados declararan ante la persecutora de Cochrane, Lorena Barudi. Ambos quedaron a disposición del Ministerio Público.
El ente persecutor indicó además que los tiros en cuestión habrían estado ajustados a derecho.
"De acuerdo a las diligencias efectuadas en el lugar tanto por la fiscalía como por Carabineros, en base al principio de objetividad, se ha logrado establecer -de forma preliminar- que la utilización de las armas de servicio de los integrantes de la patrulla estuvo ajustada a derecho", acotaron.
En tanto, la IV División del Ejército sostuvo que los hechos ocurrieron luego de que la patrulla, integrada por cuatro efectivos, controló a eso de las 23:30 del sábado a dos personas que se encontraban en la vía pública ingiriendo alcohol, quienes se negaron a la fiscalización "y procedieron a agredir al personal militar".
Al ataque, añadieron, se sumaron otras siete personas, las que habrían intentado robar el armamento militar.
"Producto de lo anterior, y considerando el empleo de las reglas del uso de la fuerza, ante las violentas agresiones sufridas e intento de robo del armamento de servicio, los integrantes de la patrulla hicieron uso de sus armas, resultando dos civiles heridos", sostuvo la institución.