SANTIAGO.- El día en que Gonzalo Blumel fue nombrado ministro del Interior, el periodista y escritor mapuche Pedro Cayuqueo publicó un mensaje en su cuenta de Twitter. "Un mapuche, aunque todavía en el clóset étnico, es el nuevo ministro del Interior. Quién lo diría", dijo.
El tuit lo respondió Juan Enrique Blümel, hermano del secretario de Estado y activista por la pluranacionalidad e interculturalidad. En ese momento, ya había revelado que su familia tenía ascendencia araucana. "Espero haga honor a la sangre", le contestó.
Este semana, el ministro abordó por primera vez de forma pública su vinculación con el pueblo originario. "Efectivamente es parte de mi historia", dijo a Cristián Warnken en Radio Pauta. Su bisabuela, Rosa Ankán, era hija de un lonco en Imperial y se casó con un misionero alemán a fines del siglo XIX.
Sobre la cultura mapuche, el ministro dijo que la conoce "harto". "No solo por las tradiciones familiares, sino porque viví harto tiempo en Futrono, que no es mapuche, pero había huilliches. Pero me tocó interactuar y conocer muy de cerca lo que son las tradiciones y costumbres", dijo.
En ese contexto, el titular de Interior expresó que le parece "valioso" que se puedan incorporar cuotas de representación para pueblos indígenas en una futura Convención Constitucional. "Eso está en el debate, quedó pendiente, y creo que dotar a la convención de representación de pueblos indígenas, más allá del mecanismo que tenemos que concordar, es valioso y es el siguiente paso que tenemos que dar", aseguró.
Sobre la historia de su familia, su hermano explicó a The Clinic en 2019 que les "costó mucho" dejar La Araucanía. "Estaba todo el proceso de despojos y los conflictos entre los colonos, las comunidades y el Estado de Chile. Yo creo que fue mi bisabuela la que tomo a decisión de proteger a los niños de toda esa violencia, y mi bisabuelo, en un ataque de humor germano y de amor por su esposa, le puso a sus hijos nombres mapuches, mis tíos abuelos Blümel se llaman Lautaro, Michimalonco, Caupolicán, Fresia, Guacolda, Galvarino", contó.
