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La situación en que se encuentran los cuatro ex frentistas que huyeron de la CAS en 1996

A casi dos décadas de la fuga, los caminos de Mauricio Hernández, Ricardo Palma, Pablo Muñoz y Patricio Ortiz siguieron por rutas distintas.

19 de Agosto de 2019 | 18:06 | Por T. Cerna, Emol
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Archivo El Mercurio
SANTIAGO.- Solo 59 segundos se necesitaron para que, el 30 de diciembre de 1996, se concretara la fuga más importante en la historia de Chile.

Un helicóptero Bell Long Ranger, especialmente acondicionado con ametralladoras y blindaje, llegó hasta la Cárcel de Alta Seguridad (CAS), disparó 188 tiros y rescató a cuatro reos tras lanzar un canastillo.

59Segundos duró el rescate en la CAS.
Eran cuatro integrantes del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR): Mauricio Hernández Norambuena, Ricardo Palma Salamanca, Pablo Muñoz Hoffmann y Patricio Ortiz Montenegro.

Los dos primeros cumplían presidio perpetuo por el asesinato del senador Jaime Guzmán y el secuestro de Cristián Edwards. Hernández, además, fue uno de los fusileros en el atentado contra Augusto Pinochet en 1986.

Muñoz Hoffmann, en tanto, cumplía por el asesinato del coronel Luis Fontaine y por el atentado al general Gustavo Leigh, mientras que Ortiz Montenegro lo hacía por maltrato a la obra de Carabineros con resultado de muerte.

El paradero de los cuatro prófugos fue desconocido por años. Ya con el paso del tiempo, la situación se fue volviendo más clara. Todos, siguieron caminos separados.

El último avance se comunicó hace un par de horas y tras casi 23 años de la fuga: uno de ellos será extraditado para enfrentar la justicia. Aquí, el detalle de cada caso.

Ricardo Palma Salamanca

Distintos esfuerzos hicieron actuales y ex autoridades locales por traer a Chile a Ricardo Palma Salamanca. Todos, sin embargo, fueron sin éxito.

La última negativa ocurrió a fines de enero, luego que la Corte de Apelaciones de París rechazara extraditar al "Negro", quien tiempo antes había sido asilado por la Oficina Francesa de Protección a los Refugiados y Apátridras (Ofpra).

En la resolución, el tribunal francés señaló, entre otras cosas, que la Ofpra estimó creíbles las alegaciones de Palma Salamanca de haber sido torturado para confesar el crimen, apoyándose de informes internacionales que corroboran la existencia de malos tratos en Chile en la década de los 90.

La situación, causó el inmediata rechazo del Gobierno y parlamentarios de Chile Vamos. El protagonista de la disputa también habló a través de un comunicado: "Es el final de un largo camino, el final de una forma de relacionarse con la realidad. Ha vuelto la tranquilidad perdida".

El Negro llegó a Francia luego de vivir por años en México. El país americano lo dejó luego que la situación se complicara con la detención de Raúl Escobar, otro ex frentista, por una serie de secuestros que le valieron una condena de 60 años. En ambos países se dedicó al arte, llegando incluso a realizar exposiciones en galerías.

Mauricio Hernández Norambuena

El último en hacer noticia fue Mauricio Hernández. Esta mañana el ministro de Justicia Hernán Larraín confirmó su extradición desde Brasil.

Y es que el también apodado "Comandante Ramiro" se encuentra en dicho país desde principios del 2000. Desde el año 2002, está recluido cumpliendo una condena de 30 años por el secuestro del publicista Washington Olivetto.

Allá se le acusó de liderar la célula subversiva que plagió al fundador de la agencia W/Brasil simulando un control policial vehicular, lo encerró en una celda a prueba de ruidos y pedía US$ 10 millones por su liberación.

Por su parte, la familia del ex guerrillero informó ayer de su traslado a una unidad policial conocida como lugar de tránsito para la extradición, mientras que Larraín, aseguró que este debería ser "en una fecha próxima".

Las penas que Hernández tendrá que llegar a cumplir, sin embargo, siguen en suspenso. Si bien en un un principio fue sentenciado a dos cadenas perpetuas, Brasil dispuso hace un tiempo la condición de que las sanciones no superaran los 30 años.

Hasta el momento se desconocen públicamente cuáles fueron los acuerdos que zanjaron ambos Gobiernos para acordar la extradición.

Patricio Ortiz Montenegro

El 1 de febrero de este año, cerca de las 10:30 de la mañana y en medio de los acalorados ánimo que generó en Chile el fallido proceso contra Salamanca, Patricio Ortiz regresó a Chile por el Aeropuerto de Santiago.

Lo hizo después de 22 años en el extranjero y como hombre sin asuntos pendientes.

"Como dice la canción vuelvo hermoso y vuelvo tierno, y vuelvo a reencontrarme con todos mis compañeros con todas mis compañeras, con todos mis hermanos y vuelvo a ejercer el derecho inapelable de reencontrarme con mi gente", aseguró tras su regreso.

Al momento de la fuga, el ex frentista se encontraba cumpliendo una condena de 10 años por la muerte de un cabo de carabinero que fue dictada poco más de un año antes. El cumplimiento, sin embargo, se interrumpió y, durante las dos décadas que estuvo en Suiza, prescribió.

A dicho país recurrió en la década de los '90 buscando asilo. En 1998 le otorgaron la calidad de refugiado y desde entonces mantiene allá su vida. A Chile solo vino por visita.

La madre del uniformado que murió a manos del ex frentista también habló. A El Mercurio dijo que su regreso le producía "rabia" e "indignación". "Es como revivir el día en que mataron a mi hijo menor", aseguró.

Pablo Muñoz Hoffmann

Sobre quien menos se sabe es sobre Pablo Muñoz. A fines del año pasado, el 28 de diciembre, autoridades señalaron que el condenado había sido atrapado en Washington, Estados Unidos.

Sin embargo, aquello terminó siendo desmentido por la PDI cinco días después: se trataba de otro chileno, con nombre similar y sin requerimiento de la justicia.

De acuerdo a la policía civil el sospechoso era Pablo Muñoz Jorquera, no Hoffman, y quien además obtuvo la nacionalidad estadounidense en 2016.

"Las diligencias se basaban en un estudio del proceso de naturalización de un ciudadano chileno en Nueva York y, en medio de este, por dudas que les surgen a autoridades norteamericanas, nos piden información verificatoria; entre ellas huellas dactilares del prófugo de la justicia chilena", dijo en aquella oportunidad para aclarar la situación el subprefecto Ricardo Quiroz, jefe de Interpol Chile.

Hasta el momento, su paradero es desconocido.
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