SANTIAGO.- El debate sobre la decadencia de las ciudades y balnearios de la Región de Valparaíso se centró esta semana en Viña del Mar.
Habitantes, intelectuales y autoridades políticas hoy lamentan que las calles céntricas de la denominada "Ciudad Bella" o "Ciudad Jardín", destaquen
no sólo por su alta densificación urbana, el "descontrol" del comercio ambulante y los desbordes del carrete durante gran parte del verano, si no que también por su profundo deterioro.
Ivan Poduje, el reconocido arquitecto y director de Espacio Público, en línea por el mal estado del emblemático balneario de Reñaca, puso la atención sobre el estado general de Viña del Mar, advirtiendo en una carta a
El Mercurio que "
lo más serio son el abandono del espacio público y la falta de regulación de locales comerciales".
"Las aceras peatonales de calles emblemáticas de la población Vergara tienen sus pavimentos rotos hace años, con basura que no se retira y carteles o tarimas de restaurantes que invaden el espacio público", aseguró.
Además, enfatizó que "más grave aún es la situación del estero, transformado en un gran baño y basural informal a pasos del edificio consistorial, la falta de mantención de las áreas verdes del parque Colombia o el grafiti que afecta los muros de mampostería del cerro Castillo y buena parte del centro histórico".
Lo anterior, considerando la pugna que enfrenta actualmente a los vecinos de Reñaca con la municipalidad de la alcaldesa Virginia Reginato, en donde se han realizado mesas de diálogo entre las partes para dar con una solución a los residentes del popular sector.
Desórdenes, consumo excesivo de alcohol, venta de drogas y el aumento de la delincuencia son algunas de las denuncias que los habitantes del sector llevan haciendo por años y que, aseguran, son la raíz del deterioro del balneario.
Municipalidad
Es por ello que exige que la administración de Reginato tome cartas en asunto. Incluso, en su misiva, asegura que dicho problema ya han sido advertido a la municipalidad en reiteradas ocasiones, "pero parece importarle poco", manifiesta.
Emol intentó contactarse con la alcaldesa, sin embargo, desde la municipalidad, aclararon que Reginato se encuentra de vacaciones. Pero quien sí quiso responder a lo planteado por el arquitecto fue el concejal de Viña del Mar, Carlos Williams (RN), y si bien sostiene que "a un especialista en el tema no le puedo contradecir", admitiendo que la ciudad tiene que ser "modernizada", alude a que desde el municipio sí se están haciendo gestiones para solucionar el problema.
"Estamos aprobando una serie de licitaciones que se han hecho a empresa para proceder a la reparación de muchas veredas, muchas calzadas, tanto de los sectores céntricos, como de los sectores altos de la ciudad, por lo tanto, hay una preocupación de parte del municipio", agrega.
Déficit presupuestario
Por la otra vereda, apuntando hacia el déficit presupuestario que tiene la municipalidad, la concejala del PPD, Marcela Varas, golpea duro, y señala que "desde un principio he venido haciendo notar la situación de abandono en la que se encuentra la ciudad, no solamente en los cerros como ha sido una constante de esta gestión municipal, sino que además ya esto se ha trasladado al centro".
"Todo esto se debe al tremendo déficit presupuestario que enfrenta la comuna de Viña del Mar (...) un déficit municipal que en este minuto es reconocido por ellos (alcaldía) de $8 mil millones, nosotros, la Nueva Mayoría, decimos que esto alcanza una cifra por sobre los $10 mil millones", añade.
Por lo tanto, la edil es enfática en afirmar que lo dicho no es "algo de un día para otro. Es una deuda de arrastre que solamente ahora se ha dado a conocer".
"Antes solo se hermoseaba el centro de Viña del Mar, ahora con el déficit presupuestario que existe ya ni siquiera eso se puede hacer (...) Ahora se están poniendo los ojos en todo lo que está pasando ¿De qué ciudad bella estamos hablando?", concluye Varas.
En ese sentido, Williams contra argumenta los dichos de su par, y sostiene que "generalmente las obras que se realizan en la ciudad son financiadas por los fondos regionales, entonces, obras de gran magnitud no se han hecho con fondos municipales".
"Nunca me ha tocado que la municipalidad haya tenido que financiar una obra de tanta importancia con fondos propios, porque son siempre insuficientes, por lo tanto, debe hacerse con fondos regionales", recalca.
Independiente de dónde vengan los fondos, Poduje es claro en anticipar que las próximas elecciones municipales permitirán exigir "transformaciones de fondo, que vayan mucho más allá del eslogan 'Ciudad Bella', cada vez más lejano de la realidad que se percibe caminando por Viña del Mar.
