RÍO DE JANEIRO.- Una huelga de conductores de camión afectó este lunes el tránsito en las autopistas de todo Brasil.
La paralización tuvo fuerte crítica del gobierno de Dilma Rousseff, que consideró que este hecho es una "maniobra política" para desestabilizar al Ejecutivo.
El ministro de Justicia de Brasil, José Eduardo Cardozo, señaló que los camioneros serán seriamente multados por este paro.
"Este es un movimiento con un sesgo claramente político", dijo Cardozo, reproducido por diversos medios brasileños.
"No hay una pauta de reivindicaciones y eso hace que la mayor parte de los camioneros del país no se adhiera a esta manifestación", añadió.
Por otro lado, el ministro de Comunicaciones, Edinho Silva, indicó que la huelga apunta exclusivamente a "desgastar al gobierno".
Los camioneros reclaman por el reciente aumento al precio del combustible y a los impuestos bloquearon el lunes el tránsito en 13 estados del país. Además, exigían precios mínimos de flete.
Dos de los principales sindicatos de camioneros señalaron que no apoyan la acción.
Sin embargo, los huelguistas dijeron que son independientes, sin vínculos a los sindicatos.
Algunos de los huelguistas dijeron
estar a favor de la expulsión de la asediada presidenta Dilma Rousseff, cuyo segundo período en el cargo ha sido sacudido por un enorme escándalo de corrupción y una economía que se desploma.
