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Revista Time elige a la rapera estadounidense Lizzo como la artista del año

El medio aseguró que en 2019 la cantante "fue un haz de luz que brillaba a través de la tristeza y la oscuridad, diciéndonos que nos amemos a nosotros mismos, incluso si el mundo no siempre nos ama".

11 de Diciembre de 2019 | 14:15 | Redactado por M. Álamos, Emol
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El Mercurio
Melissa Jefferson (31), más conocida por su nombre artístico "Lizzo", fue escogida como la artista del año por la Revista Time. La publicación estadounidense destacó que la cantante, nominada a ocho premios Grammy 2020, aboga por el amor propio con canciones "divertidas" y "pegajosas".

"Lizzo representa algo nuevo. Su sonido es implacablemente positivo y pegadizo: golpes que sintetizan pop, rap y R&B, con ganchos tan agudos que parece que han estado en tu cerebro desde siempre", resalta el medio.

"Sus letras son divertidas, subidas de tono y vulnerables: recordatorios para deshacerse de cualquier idiota que te detenga y para convertirte en tu mayor fanático", agrega.

Asimismo, Time asegura que Lizzo durante 2019 fue "un haz de luz que brillaba a través de la tristeza y la oscuridad, diciéndonos que nos amemos a nosotros mismos, incluso si el mundo no siempre nos ama". "La necesitábamos a ella", remarca Paola Kudacki, la persona que realizó la reseña de la artista para la publicación estadounidense.

Describiéndola como "ruidosa, divertida y efervescente", el medio cuenta que Lizzo comenzó su carrera hace más de una década, sin lograr grandes éxitos. Luego, su canción "Truth Hurts" -cuya versión original fue lanzada en 2017- apareció en la película de Netflix "Someone Great" (2019) y la propulsó a la cima del ránking Billboard Hot 100.

Lizzo es una artista afrodescendiente y de talla grande. A pesar de que predica sobre el empoderamiento y el amor propio, ha transparentado en el último año que ha debido luchar por quererse a sí misma.

Este año "estuve experimentando un poco de infelicidad. No estaba contenta con lo que sentía por mi cuerpo. No me sentía sexy, y no sabía cuándo eso iba a terminar. Hubo momentos en que subía al escenario y decía: 'Todos ustedes, no voy a mentir. No me siento yo'. A veces me derrumbaba y lloraba. A veces la audiencia me animaba para hacerme sentir mejor. Me estaba enfermando mucho. Yo estaba como: '¿qué demonios está pasando? Necesito volver a enamorarme de mi cuerpo'", declara.

La artista se encuentra en terapia trabajando en lo anterior, además de estar lidiando con las nuevas presiones que enfrentan las celebridades. "No quería ser famosa", dice ella. "¡Quería ser como Brandon Boyd de Incubus! Solo quiero ir al mercado de agricultores", añade.
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