La rápida propagación de la variante Ómicron de covid-19 está provocando nuevas restricciones de movilidad en varios países, agudizando la escasez de mano de obra y alimentando las interrupciones en la cadena de suministros del comercio global, lo que, a su vez, impulsa la inflación que golpea al mundo.
Así la contagiosa variante está complicando el panorama de crecimiento económico mundial. De hecho, el Fondo Monetario Internacional (FMI) informó esta semana que bajó su estimación de crecimiento global para 2022 a 4,4%, 0,5 puntos porcentuales menos que lo proyectado anteriormente. "En buena parte, debido a los recortes de previsiones en Estados Unidos y China", señaló Gita Gopinath, alta funcionaria del FMI.
En Chile Ómicron también se expande con velocidad. La cifra de contagios diarios ha bordeado los 30 mil -algo inédito desde que el coronavirus se instaló en marzo de 2020 en el país-, la positividad superó el 20%, la más alta desde julio de 2020. Con todo, la hospitalización en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de pacientes covid se mantiene baja.
En ese escenario, el eventual efecto que pueda tener esta variante sobre la economía nacional ciertamente es algo que preocupa, considerando que algunas restricciones de aforos que la autoridad ha aplicado en los últimos días para evitar aglomeraciones, lo que, además de los propios resguardos personales, podrían afectar -sobre todo- a actividades ligadas al comercio y servicios como restaurantes y turismo.
Incluso desde el sector minero han levantado alertas por el crecimiento de contagios en faenas, aunque no se han registrados interrupciones productivas y se han profundizado las medidas de protección para evitar la propagación.
Los gremios económicos quieren evitar a toda costa que se profundicen las medidas restrictivas, dado el alto impacto económico que aquello provoca y no así un efecto relevante en caídas de casos. "Las restricciones debieran estar orientadas a aquellas personas que no se han vacunado", resaltó Máximo Picallo, presidente de la Asociación Chilena de Gastronomía (Achiga).
"Llamamos a las autoridades a actualizar los criterios que aún se mantiene respecto a las medidas para evitar contagios por covid a fin de disminuir las externalidades negativas que estas provocan en el comercio", comentó, por su parte, Carlos Soublette, gerente general de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS).
Por lo pronto, economistas consultado por Emol no ven que Ómicron tenga un impacto demasiado relevante sobre el crecimiento económico chileno -a diferencia de las olas anteriores- y muy poco de ello se vería reflejado en Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) de enero de 2022, ante la baja base de comparación considerando que en el primer mes de 2021 la economía registró un crecimiento negativo de -2,9%.
"Con una base de comparación baja y las tasas de crecimiento que tenemos actualmente, probablemente el Imacec (de enero) va a estar en el rango de dos dígitos, y seguramente más cercano al 14%", dijo Cristián Echeverría, director del Centro de Estudios en Economía y Negocios de la UDD.
"El avance de la variante Ómicron probablemente va a imprimir alguna tendencia a freno en el crecimiento, pero no debiera ser demasiado significativo", afirmó. "En todas las formas de la vida económica ha habido adaptaciones estos dos años (...), nuestra economía lo ha hecho en forma extraordinaria, en términos de continuación de la pandemia y de mantener a la economía funcionando, entonces yo creo que la variante Ómicon va a tener poco efecto", agregó.
Por su parte, Sergio Lehmann, economista jefe de BCI, comentó que "la experiencia internacional, la evidencia que hemos recogido de Estados Unidos y Europa, donde la variante Ómicron ha generado un incremento muy importante de los contagios, da cuenta de que efectivamente puede afectar en algún grado el dinamismo de la economía, particularmente en aquellos sectores donde se exige mayor presencialidad, más bien vinculado a servicios".
Para lo tanto, según dijo, es esperable que en Chile ocurra algo similar. "Eso tiene que ver con las precauciones naturales que toman las personas cuando ve estos incrementos en contagios". Así, pronosticó que en enero la economía se expandirá en torno a 12%, lo que podría terminar siendo "ligeramente" más bajo considerando el eventual efecto Ómicron. "Estamos hablando de solamente algunas décimas más o menos en torno a ese valor", subrayó.
"En todas las formas de la vida económica ha habido adaptaciones estos dos años (...), nuestra economía lo ha hecho en forma extraordinaria, en términos de continuación de la pandemia y de mantener a la economía funcionando, entonces yo creo que la variante Ómicon va a tener poco efecto".
Cristián Echeverría
Según el ex ministro de Hacienda,
Felipe Larraín, la ventaja que tiene Chile ante Ómicron es que "estamos con un porcentaje de vacunación elevado, dentro de los más altos a nivel mundial", añadiendo en entrevista con EmolTV que "sin duda estamos bien preparados".
Además, resaltó que, si bien esta variante es "mucho más contagiosa" que las anteriores, "sus efectos son mucho más tenues". Con todo, aseguró que "es muy difícil resistir esta ola de contagios y eso va a afectar, en la medida que se implementen restricciones, a la actividad económicas".
"Pero, en lo positivo, estamos mejor preparados. Hemos aprendido, de alguna manera, a convivir mejor con esta pandemia", agregó Larraín.
Cecilia Cifuentes, directora del centro de Estudios Financieros del ESE Business School de la U. de Los Andes, espera que Ómicron sí tenga un efecto sobre el crecimiento económico en enero, "pero modesto".
"No creo que sea tanto el efecto. Efectivamente los contagios van a subir muy rápido, pero al final, afortunadamente, el proceso de vacunación ha sido muy bueno, y al parecer las personas vacunadas la probabilidad de que se agraven con esta variante es bajísima, y en ese sentido, mientras la situación hospitalaria se mantenga manejable, no van a haber cuarentenas estrictas ni nada que nos haga retroceder a lo que vimos en los dos años anteriores", acotó.
"Así que creo que, si hay algún efecto, va a ser muy marginal. Febrero podría ser un poquito más marcado el efecto, porque probablemente el peak lo vamos a tener durante ese mes", añadió.
Mientras que el economista y ex consejero del Banco Central, Manuel Marfán, sostuvo a EmolTV que "yo no creo que las consecuencias económicas y sociales de esta ola sea comparable a la que tuvimos especialmente en el año 2020. Las personas han aprendido a convivir con las pandemias y las restricciones sanitarias".
"No quiero minimizar esta ola, lo que estoy diciendo es que las consecuencias económicas y sociales probablemente van a ser mucho más atenuadas. Claro, siempre van a ser mucho mayor para las actividades que atienden público directamente, los restaurantes, los hoteles, pero yo creo que no va a tener el impacto gravísimo", concluyó.
