En una carrera de caballos celebrada en el Hipódromo de Saint-Cloud en París, Francia, ayer viernes, se vivió un hecho lamentable y anormal en este tipo de competencias.
Fue indignante: El jockey Christophe Soumillon empujó a su par Rossa Ryan, quien cayó de su equino quedando en el suelo visiblemente adolorido tras no poder amortiguar de buena forma la caída. Pudo terminar en tragedia.
"Desafortunadamente, cuando le pedí a mi caballo que fuera hacia allí y hacia la derecha, lo empujé un paso o dos y (Ryan) se cayó. Inmediatamente, supe que cometí un error. Estoy terriblemente triste por lo que sucedió porque odio ver cosas como esta. No fue un buen acto de mi parte, lo siento mucho y quiero disculparme por lo que hice hoy", dijo Soumillon tras el suceso.
El infractor, uno de los mejores jinetes del mundo, le dieron apenas 60 días de sanción, despertando la indignación. Además, su castigo comienza desde el 14 de octubre, por lo que podrá estar presente en el prestigioso Prix de l’Arc de Triomphe de este fin de semana.
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