Roberto Bautista sorprendió y eliminó a Novak Djokovic.
Reuters
El tenista español Roberto Bautista (25°) dio la sorpresa de la jornada en el Masters 1.000 de Miami, al remontar y derrotar en octavos de final al número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic (1-6, 7-5, 6-3).
De esta forma, los dos principales favoritos para quedarse con el título quedan fuera de carrera. Esto porque antes David Ferrer eliminó al alemán Alexander Zverev en tres sets, por 2-6, 7-5 y 6-3.
En el tercer turno de la pista estadounidense, el número uno del mundo, quien en tercera ronda necesitó tres sets para superar al argentino Federico Delbonis, inició el duelo ante el español con solvencia, castigando sus errores con dos bolas de break que no desaprovechó para ponerse 5-0.
En su tercera bola de set, el balcánico cerró el primer parcial en menos de media hora, un comienzo que apuntaba a un partido sencillo para el primer cabeza de serie en Miami. Sin embargo, el castellonense reaccionó en una gran segunda manga haciendo gala de sus mejores golpes.
Tras perder su primer saque, Bautista respondió con un contrabreak en un intercambio en los primeros juegos que se interrumpió, por la aparición de la lluvia, con 5-4 para el español. Cuando las nubes dieron una tregua, el partido se reanudó en el decimotercer juego. Cuando el tie break parecía inevitable, el de Castellón firmó un quiebre que le permitió forzar el tercer parcial.
En él, empezaron bien las cosas para Bautista, quien rompió para el 3-1 tras una doble falta rival, aunque Djokovic no esperó mucho para devolverle la rotura. Un nuevo quiebre del número 25 del mundo, confirmado posteriormente con su servicio, le dejó a un solo punto de la victoria.
La confianza abandonó al serbio, que a pesar de defender su saque no pudo hacer nada en el noveno juego, cuando Bautista selló en su primera bola de partido y en algo más de dos horas y media de juego su tercera victoria en los diez duelos disputados en el circuito ante el balcánico.
De esta manera, se citará en cuartos de final con el vigente campeón del torneo, el estadounidense John Isner, que eliminó en octavos de final al británico Kyle Edmund en un encuentro resueltos en dos muertes súbitas (7-6(5), 7-6(3)).
